lunes, 24 de enero de 2011

Toponimia, Fitotoponimia y Zootoponimia


Toponimia
Dícese del nombre propio de lugar.
La toponimia u onomástica geográfica es una disciplina de la onomástica que consiste en el estudio etimologico  de los nombres propios de un lugar. El origen de la palabra "toponimia" se remonta al griego: "topos", que significa "lugar", y "onoma", que significa "nombre": τόπος (tópos), "lugar" y νομα (ónoma), "nombre".
La toponimia es una disciplina que se dedica al estudio sobre el origen y significado de los nombres de lugar o topónimos. Junto con la antroponimia constituye una disciplina más general que en la actualidad conocemos con el nombre de onomástica u onomatología. También a la toponimia se la conoce con el nombre de toponomástica.

La toponimia es el estudio de los nombres de lugares, mientras que la onomástica es el estudio de los nombres en general. La onomástica comprende tanto los nombres propios de persona (y en este caso se denomina antroponomástica o antroponimia) y los nombres propios de lugar (toponomástica o toponimia).  Se ha definido tradicionalmente como el estudio y significación de los nombres geográficos, pero esta connotación la circunscribe sólo al aspecto lingüístico, que es importante y fundamental para esta disciplina; mas no suficiente, en virtud de que no toma en consideración otros elementos involucrados en el tratamiento sistemático de los topónimos. También se ha definido como la disciplina que se ocupa de enumerar y catalogar los nombres propios de lugar, lo cual es aún más limitante, ya que la reduce a un frío catálogo de nombres geográficos. En este orden de ideas, debe entenderse por toponimia: una rama de la onomástica que se ocupa del estudio integral, en el espacio y en el tiempo, de los aspectos históricos, geográficos, lingüísticos, antropológicos, sociológicos y económicos, que permitieron y permiten que un nombre de lugar se origine y subsista. 


Uhm…esto último no se si nos simplifica o nos complica el concepto, lo que sí está claro que nos enfocaremos a entender toponimia como una herramienta de la cartografía con un valor histórico, lingüístico, legal, cultural que merece y debe ser conservado como un acervo folclórico y cultural de cada pueblo, municipio, estado y país y que nos ayuda a entender las motivaciones de la ocupación del territorio.

Ahondaremos en los siguientes articulos sobre los aspectos Fitotoponimico y Zootoponimicos del estado Portuguesa y los alrededores de esta tierra de gracia.

Fitotoponimo: Toponimico referido a las plantas. En este aspecto nos basaremos en el libro de la profesora Irama Casale (1997) La Fitotoponimia de los Pueblos de Venezuela editado por la UCV y el Servicio Autónomo de Geografía y Cartografía Nacional. Entre estos mencionaremos: Mata de Palma, La Quebrada del Mamón, El Cojobal, Palma Real, Jobo Liso, Palo Solo, La Guafa, Las Guaduas, Las Matas, Las Cocuizas, Los Higuerones, El Cocal, El Chaparral, Mesa de Cacao, Palmasola, Cerro de Paja, Mijagualito, Los Tres Bijaos, El Pajón, El Guamal, Caimital, Totumito, Las Cojobas, Maporal, El Nuezal. 


Zootoponimo: Son los toponimico referido a la fauna. En nuestro estado son varios los nombres de esta categoría: Guache, Chiriguare, Guanare (viene de Guanaguanare) aunque puede también categorizarse como un hidrotoponimico, El Buey, Los Toreños, Guarura, La Culebrita, La Cueva del Sapo, El Sardinero, El Caimán, El Gavilan, El Zamuro, El Búfalo, El Tigre, La Grillera, El Venado, entre otros especies  de la fauna silvestre y domestica. 

También intentaremos dar nuestra hipótesis interpretativa sobre nombres sin claro origen: Tucupio, Morador, Anus, Coromoto, Cospes, Mesa del Cura, Curazao o Curasao, Igües, Pocoró, Suruguapo, Cambuyon, Desembocadero... Invito a los lectores a enviar los nombres de sus centros poblados o localidades conocidas  y si la conoce diga su toponimia. 

Elaboremos el diccionario de toponimicos del estado Portuguesa.  
Dejo para su disfrute esta pieza de Pablo Neruda relacionada con los nombres de Venezuela. 
Oda a los nombres de Venezuela
Los llanos requemados de febrero,
ardiente es Venezuela y el camino divide
su extensa llamarada,
la luz fecundadora despojó el poderío de la sombra,
cruzó por el camino,
mientras crece el planeta a cada lado,
desde Barquisimeto hasta Acarigua.
Como un martillo el Sol pega en las ramas,
clava clavos celestes a la tierra,
y como un gallo encrespa su plumaje
sobre las tejas verdes de Barinas,
sobre los párpados de Suruguapo.

Tus nombres, Venezuela,
los ritos enterrados, el agua, la batalla,
el sombrío enlace de jaguar y cordilleras,
los plumajes de las desconocidas aves
condecoradas por la selva,
la palabra apenas entreabierta
como de pluma o de polen,
o los duros nombres de lanza o de piedra:
Aparuren, Guasipati, Canaima, Casiquiare,
Mavaca, o más lejos, Maroa,
donde los ríos bajo las tinieblas
combaten como espadas,
arrastran tu existencia,
madera, espacio, sangre,
hacia la espuma férrea del Atlántico.

Nombres de Venezuela fragantes y seguros
corriendo como el agua sobre la tierra seca,
iluminando el resto de la tierra como el araguaney
cuando levanta su pabellón de besos amarillos.

Ocumare, eres ojo, espuma y perla,
Tocuyo, hijo de harina,
Siquisique, resbalas como un jabón mojado y oloroso
y, si escogiera,
el Sol nacería en el nombre de Carora,
el agua nacería en Cabudare,
la noche dormiría en Sabaneta.
En Chiriguare, en Guay, en Urucure,
en Coro, en Bucaray, en Moroturo.
En todas las regiones de Venezuela
desgranadas no recogí sino
este tesoro: las semillas ardientes
de esos nombres,
que sembraré en la tierra mía,
lejos.

Pablo Neruda 



Consultas on line


http://es.wikipedia.org/wiki/Toponimia
http://www.profesorenlinea.cl/castellano/Toponimia.htm
http://guiaturvzlae.tripod.com/guiatur-tradiciones-toponimia.htm

domingo, 16 de enero de 2011

La pesqueria llanera

Se muere la pesca 


Río La Portuguesa

Durante muchos años los ríos llaneros, principalmente los integrantes de la cuenca de los ríos Guanare y La Portuguesa, proveyeron de proteína animal al nativo de estas tierras y a la región central, occidental y oriental de Venezuela. En un principio se distribuía fresco, posteriormente el uso de la sal permitió su movilización en el tiempo y espacio; y el siglo XX con la llegada de la electricidad, y el hielo,  fue llevado a Maracaibo, San Cristóbal, Mérida, Caracas, entre otras ciudades. 

Es común el consumo de pescado de origen fluvial en el eje Guanare-Guanarito. La Gastronomía portugueseña se destaca por el consumo de cachama frita, rellena, en salsa... así como la preparación de bocachico o coporo y ni se diga del bagre en sus diversas presentaciones. Y para rematar cuando sus busca recuperar energias no dude en tomarse una sopa o hervido de pescado o cabeza de pescado o de Curito.  Y cientos son los que conocieron esta región buscando la pesca deportiva como elemento de distracción y forma de llevar proteína animal barata a la casa, si acaso, porque si no eres buen pescador quedaras para arreglar los que pesquen tus compañeros de faena. Quebrada del Mamon, Pozo de Subaranero e infinidad de pozos que existian en el río La Portuguesa asi como los tradicionales pesqueros de la Aduana, La Florida y en el rio Guanare Morita, Portachuelo, Guanarito, Garcitas, Cambuyon, entre otros. 

Sin embargo, el aumento de la demanda de este recurso y su sobreexplotación, así como la construcción de grandes obras hidráulicas y la destrucción de los hábitats y la contaminación de las aguas son factores que están destruyendo este valioso recurso. Y dirán que exagero. Quien haya pasado por el rio Guanare en Diciembre 2010 o enero 2011 se dará cuenta que a orillas de la carretera nacional decenas de pescadores ofrecen coporo (Prochilodus mariae) de menos de 15 cm para la venta. Sacos llenos con estos peces, en estado juvenil casi un alevín son llevados en motocicletas y a nadie parece preocuparle ni al ciudadano común, ni al Ministerio del Ambiente, ni a la Guardia Nacional, menos a la Alcaldía ni a la Gobernación.

El uso de prácticas pesqueras dañinas: como chinchorros o atarrallas así como el uso de explosivo está prohibido sin embargo en esta sociedad de cómplices en la cual vivimos somos incapaces de denunciar a los que estan acabando, ya no con lo que le dejaremos a nuestros hijos, no¡  ya el tiempo nos alcanzó y ni siquiera nos quedarán peces pero ni para nosotros mismos en un par de decadas.